Un puente bien aprovechado: me ha dado tiempo a hacer un pequeño óleo de Marta. La foto no le hace justicia, pero es que no hay forma de que salga sin brillos y con los colores reales (los reflejos del pelo no son de ese color que parece blanco, las gradaciones son más sutiles, etc...), pero en fin, hasta que se seque del todo y pueda hacer una foto medio decente, manejaremos ésta.
Quería hacer un retrato iluminado desde arriba, y sobre todo cambiar un poco la técnica de arranque: frente al clásico mancha-progresión de general a particular en todo el cuadro simultáneamente-brillos y luces-acabado, quería probar algo que me animara desde el primer momento. Con el esquema clásico, tenía un 10% del tiempo de ejecución en el que estaba muy ilusionado, un 80% en el que veía que lo que tenía frente a mí era una porquería, y el 10% final en que volvía a animarme si las cosas habían ido bien.
Así que me planteé el ir haciendo el cuadro por partes: finalizar un trocito y seguir con otro, de forma que al ver los "trocitos finalizados" tuviese la sensación de avance y de que merecía la pena continuar con la obra. Ésto, que para mí era novedoso frente a la ortodoxia de lo que habitualmente se enseña en las facultades de Bellas Artes y la mayoría de los libros, se reveló como que no era tan nuevo, hojeando un libro de Miguel Ángel. En él aparecía esta imagen:
Puede observarse como (además de una mancha de color complementario al que será el final) Miguel Ángel ha ido avanzando por las figuras terminándolas completamente trozo a trozo, sin importarle cómo estaban otros puntos de la pintura.
Avanzando en el tema, resulta que este método era el más popular en los ateliers europeos de finales del XIX (probablemente mi periodo favorito en pintura), y que está siendo retomado en las escuelas de EEUU. Así, artistas como Kassan, Aristides, etc, lo utilizan hoy en día. Basta ver este ejemplo (¿cómo hará para que le salga tan bien la foto?) de Roberto Ferri:
En mi caso, sí he notado varias cosas, todas positivas: avanzo mucho más rápido, estoy más animado, es más fácil de pintar que si me enfoco en todo el cuadro a la vez... Y esto, para alguien que apenas tiene tiempo para nada, vale mucho.
Óleo sobre tabla 27x35 cm.
Sin entrar en parecidos o no, ya que no conozco a Marta, te diré que el retrato es muy bueno.
ResponderEliminarCuando veo tus retratos y tus acuarelas no sé qué es lo que ves en mi pintura y mis dibujos. Tú sabes un huevo, tanto de dibujo, como ahora en pintura. Tal vez eso, cuando te conocí, hará dos, sí que andabas un poco flojo (en pintura), pero tu tesón te ha llevado a pintar de maravilla hoy.
Así que no te quejes tanto!!!!
En fin, no voy a continuar con el rollo.
Un abrazo.
Gracias Joshemari. Supongo que con los retratos "realistas" a unos nos gustan más que a otros...yo los encuentro muy divertidos, pero entiendo que aburran a otros.
ResponderEliminarPues chico, en tus acuarelas veo varias virtudes que me faltan a mí: el dominio del paisaje urbano (algún día tengo que ponerme con ello), el sacar partido a cosas pequeñas cotidianas (como tus juguetes y soldados de plomo), y el disfrutar tanto de tus acuarelas y reuniones de los miércoles. Además de muchas ganas y tesón, que es algo a lo que yo aspiro también. Resumiendo: tus acuarelas me gustan porque veo caminos por donde tú ya has pasado, y que me gustaría recorrer a mí también algún día.
Un abrazo, Joshemari.