lunes, 21 de marzo de 2011

Acuarela diaria - ¡Accidente!

Bueno, en realidad estoy mintiendo: no es una acuarela. Y tampoco es sobre un accidente. En realidad es una aguada hecha con café, sobre Louise Brooks. Y lo de accidente viene porque estaba abriendo un tarro de tinta azul (esa manía de hacer dos o tres dibujos a la vez), y se me ha caído un gran goterón azul en la comisura de los labios de la pobre Louise, así que no ha habido más remedio que aprovecharlo y continuar con el azul también.

Louise Brooks fue una de las actrices más famosas del cine mudo en los locos años de entreguerras, y que puso de moda el corte a lo "garÇon". Nació en 1906 y murió en 1985, y ha sido un icono para un montón de artistas, entre los que destacan (del mundo gráfico) Guido Crepax y Manara. De hecho, ya en 1926 protagonizó un comic: "Dixie Dugan".

Fue una de las "víctimas" de la transformación del cine mudo al sonoro, negándose a versionear sus películas mudas en habladas. Además, su etapa europea fue considerada muy subida de tono en su país de origen (EEUU), por lo que poco a poco fue apartada de la industria del cine.

Se inició como bailarina a muy tierna edad, y pronto engrosó las filas de las chicas Ziegfeld, el equivalente a las películas de 007 hoy en día para lanzar a una chica a la fama. Pronto el mundo de Hollywood se fijó en ella y comenzó a hacer películas, pero a ella Hollywood le daba igual. Se lanzó a la meca del cine europeo del momento: Alemania. Allí rodó el que sería su personaje vital: Lulú, que aparecía en "La caja de Pandora" de Pabst. Tras este film vinieron varios más tanto en Alemania como Francia, con contenidos demasiado extremos para la época, aunque hoy en día nos sorprenda su ñoñez.

Cuando volvió a casa con 25 películas de bagaje, Hollywood la dio la espalda, tanto por sus películas europeas como por no seguir las reglas no escritas de los estudios. Así que se dedicó a leer, pintar y escribir ensayos sobre la industria del cine, hasta que en los 50 los franceses la redescubrieron y crearon el icono Brooks.

"Aprendí a actuar viendo a  Martha Graham bailar, y aprendí a bailar viendo a Charles Chaplin actuar".

9 comentarios:

  1. Sé que su meta era hacer una aguada monocroma, pero usted sabe que este accidente fue bien contorneada, precioso trabajo.
    Gracias por más cultura.
    Un abrazo.

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  2. Esto es la esencia del arte. Amarlo, en lugar de pelearse con él.
    enhorabuena

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  3. Asi tiene que ser... hay que trabajar con lo que hay en el papel y nunca tirarlo a la basura antes de haber intentado todo y luchado un poco para que eso funcione! Aqui lo has hecho de maravilla!! En hora buean por esta aquarela tan bonita, para mi es una aquarela, he he!

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  4. Un claro ejemplo de que a veces la improvisación es arte.
    Un abrazo, Tayete.

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  5. ¡¡te ha quedado preciosa!! si me ha llamado más la atención con azul! eso es un pedazo de artista que ha sabido por dónde salir ¡¡que tio!!

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  6. Pues vaya forma provechosa de "apañar un desaguisado" :)
    Me gusta, Tayete!
    Un abrazo

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  7. Gracias NIl: a veces los accidentes nos ayudan ;)

    Susana: pues tienes razón, ¡pero a veces es un amor muy reñido!

    Inma: muchas gracias, maestra.

    Helen: Lo que acabas de comentar creo que es lo que más se tarda en aprender: no hay que desesperarse en esos momentos en que parece que no está saliendo nada. Al final, si se insiste lo suficiente, todo llega a buen puerto.

    Oñera: Sí, pero a los que nos gusta tener cierto control, nos pega unos sustos tremendos el tener que lidiar con improvisaciones ;-)

    Cnxy: Muchas gracias compañera. Y lo digo no sólo por el comentario, sino por todo lo que haces...

    Anais: A la fuerza he tenido que apañarlo; me alegro de que te guste el resultado final.

    Geraldo: Je je, mi idea es que fuera un retrato de Louise en ocres, y ha acabado en "retrato en azul" ;)

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¿Qué pinceladas vas a añadir a mi cuadro?